Una vez las maderas están secas, son trasladadas desde el sur a nuestro taller en Santiago, donde los tablones son nuevamente inventariados, contándose con un completo registro de las maderas disponibles para trabajar.
La mezcla de trabajo manual y maquinaría del taller, junto a la experiencia y apertura al aprendizaje de nuestro equipo humano, concretan la transformación final de la materia prima en nuestros muebles.
Nos enfocamos en todos los detalles que resalten el carácter de nuestras maderas, con especial enfásis en el lijado y sellado, permitiendo que cada pieza muestre su total identidad.